Durante las dos semanas previas a las celebraciones
de Fiestas Patrias, los alumnos de los terceros medios
compartieron el espíritu fraternal de la solidaridad,
participando activamente como voluntarios en los hospitales de
San Fernando, Chimbarongo y la Posta de Placilla.
Fueron dos semanas donde el mensaje puesto en
marcha este año ¿Hasta donde llega tu amor fue puesto en
práctica por los alumnos que abandonaron la sala de clases para
desarrollar un aprendizaje en terreno ayudando en las labores
propias de un hospital, consultorio y otros servicios de
atención médica.
La instancia sirvió además para que muchos alumnos
pusieran en juego su real vocación, hacia las áreas biológica,
matemática o humanista, y pudieran ver en terreno la real forma
en que operan los servicios de salud.
Un rol fundamental fue el que cumplieron los
alumnos, ya que la actividad impulsada por los cursos y la
Coordinación de Pastoral de nuestro Colegio, fue vital en
aportar muchos granos de arena para hacer sostenible la crisis
desatada en algunos servicios por el paro de los trabajadores de
la Salud.
Así muchos alumnos redoblaron sus esfuerzos y
vieron en terreno el poder de entrega que pueden realizar,
orientados en el bien de los demás.
Durante las semanas en que Tercero A y B asistieron a los
hospitales, pudieron ver en terreno la magnitud de la
desigualdad social que afecta a nuestro país y fueron
protagonistas de los procesos internos de un hospital. Así hubo
algunos que ayudaron en la cocina, otros en las salas de
enfermería, acompañar a los enfermos, asistir a las auxiliares y
enfermeras en situaciones básicas, y un sinfín de tareas con las
cuales compartieron.
Al final de cada jornada, nuestro alumnos estaban
exhaustos, pero contentos de haber sido protagonistas en la
entrega de amor y ayuda a los demás. Luego de dos semanas, y ya
reinsertos en la vorágine normal de nuestro Instituto, nuestros
alumnos ya no son los mismos que se fueron. Muchos de ellos
vuelven con un convencimiento vocacional más profundo acerca de
su futuro, otros con el dulce sabor de haber entregado lo mejor
de si para personas que en cualquier otra situación resultan
desconocidas y lejanas, pero que experiencias como ésta, inserta
en el Proyecto 14, ayudan a concebir como mucho más cercanas y
mucho más humanas de lo que la realidad común indica.
La Experiencia Solidaria desarrollada por los
alumnos del ISF fue un completo éxito, y eso se nota en los
rostros de nuestro alumnos hoy. Son los mismos de ayer, pero con
una mirada distinta de la realidad en la que viven.
fotos