La celebración eucarística fue presidida por Monseñor Alejandro Goic, Obispo de nuestra Diócesis, quien inició su homilía preguntando a los jóvenes cuáles eran sus aspiraciones y expectativas. Lo mismo hizo con los padres. Posteriormente los llamó a ser felices sin pasar por encima del prójimo y a ser constructores de una sociedad más humana y cristiana. Los invitó a tener mucho cuidado con los falsos ídolos de hoy y a ser firmes defensores de la vida, teniendo como único modelo a Jesucristo. Un profundo silencio, señal de gran atención y acogida, fue el marco en que Monseñor entregó el mensaje del Evangelio. La Eucaristía se caracterizó por la gran participación de Hermanos, docentes, padres y alumnos en cada uno de los momentos de su desarrollo.
 
Durante la acción de gracias, dos papás de alumnos egresados agradecieron al Colegio todo lo entregado a sus hijos, especialmente en el ámbito valórico. Junto con ello, las presidentas de los papás de Cuarto Medio hicieron entrega a nuestro Rector de una hermosa imagen de la buena Madre tallada en madera. Al concluir la celebración, nuestro Rector, don Claudio Arellano C., saludó a los egresados y a sus padres, agradeciéndoles la confianza que han expresado en la formación Marista. Agradeció también a los papás el regalo que entregaron al Colegio y comprometió su ubicación en un lugar de privilegio. Finalmente, la Comunidad de Hermanos Maristas junto al Rector, procedieron a entregar la insignia dorada del Colegio a todos los egresados y, junto con ello, entregaron también un presente a las 28 familias que dejan definitivamente el Colegio.

La celebración concluyó con un cóctel ofrecido por los papás de Cuarto Medio a todos los asistentes.  
fotos