Monseñor Goic en su plegaria reconoció abiertamente los valores dados en este Instituto, y llamo a los jóvenes a ponerlos en obra, no tan solo en los estudios superiores, sino también en la vida cotidiana.
Sin lugar a dudas, la última eucaristía como alumnos deja una huella imborrable en los corazones de quienes egresan. Ser Marista es una responsabilidad social y los valores que tenemos hay que colocarlos en práctica. Claramente es el mensaje de los jóvenes que hoy salen de cuarto, y el mensaje que los apoderados le ofrecen a sus hijos. Por ende es importante esta celebración litúrgica, en donde los padres acompañan a sus hijos y los invitan a reflexionar acerca de la vida que hoy comienzan.
De esta forma la Misa realizada por nuestro Monseñor Goic, nos llamo a un recogimiento pleno de la vida católica de un cristiano. “Debemos ser parte de esta sociedad y luchar siempre por los valores cristianos”.
Una vez realizada la homilía, se procedió a la entrega del recuerdo de los cuartos Medios y a la entrega de la Cruz, a las familias que hoy nos dejan.